Se conoce como ecosistema al sistema interactivo y cíclico que se desarrolla entre medios físicos y organismos vivos. Los ecosistemas necesitan que exista una relación sinérgica entre los factores bióticos – seres vivos – y los factores abióticos – elementos inanimados – para perdurar y prosperar con el tiempo, ayudando esto a mayor biodiversidad, y esto a mejor calidad ambiental.
A lo largo y ancho de nuestra Tierra hay cientos de ecosistemas específicos, que se clasifican según su vegetación, clima y orografía.
Sin embargo, antes que eso existe una forma que los dividirá en dos grupos generales, entre ecosistemas terrestres y acuáticos, aunque algunos autores también incluyen a los ecosistemas mixtos en la clasificación.
En el post de hoy te vamos a enseñar los diferentes tipos de ecosistemas, los cuales vistos desde una escala más grande son los componentes de un ecosistema entero llamado: Planeta Tierra.
1. Ecosistemas Terrestres
La mayor diversidad de ecosistemas se encuentra en la superficie terrestre. Aquí es donde habita el ser humano, cumpliendo un rol protagónico en casi todo el espacio habitado.
No hay mucho de qué hablar acerca de qué es un ecosistema terrestre, solo que es aquel ubicado sobre la superficie terrestre de nuestro planeta, por ende, vamos ya a los diferentes y principales tipos de ecosistemas terrestres – primarios – según su clima y vegetación, entre los que hallaremos desiertos, polares, selvas, bosques, matorrales y más.
a. Taiga
Se le denomina taiga a un ecosistema caracterizado específicamente por la aparición de formaciones boscosas de coníferas. Este ecosistema comprende la mayor parte de masa forestal de la superficie y se encuentra ubicado exclusivamente en el hemisferio norte, ocupando el norte de Rusia, Alaska y demás zonas del norte de Europa.
Su diversidad de especies no es tan inmensa debido a las bajas temperaturas que éstas deben afrontar en ríos y lagos.
b. Selva tropical
En medio del planeta, las selvas tropicales son uno de los ecosistemas más importantes debido a la inmensa cantidad de oxígenos que aportan al planeta. Y es que, dentro de este tipo de hábitats se encuentra la selva del Amazonas ubicada en Brasil.
Su clima es ecuatorial tropical, cálido y lluvioso durante todo el año, posibilitando un bioma ideal para una gran biodiversidad.
c. Tundra
Groenlandia, Alaska y el norte de Rusia son los principales recipientes de este ecosistema caracterizado por su subsuelo helado, la falta de árboles y el crecimiento exclusivo de líquenes y musgos.
Su fauna es reducida al igual que la taiga, aunque cuenta con presencia de mamíferos como caribúes, focas y osos, así como otras especies imprescindibles como el salmón.
d. Desierto
Y de temperaturas gélidas pasamos drásticamente a un ecosistema bastante cálido y hostil para la vida, el desierto. Este ecosistema es definido en cierta medida por su escasa vida tanto de flora como de fauna.
Su clima árido evita las lluvias en gran parte del año y sus procesos de erosión forman un paisaje desértico que, dependiendo de su tipo; permite el desarrollo de mayor o menor volumen de vegetación.
Cabe destacar que estos ecosistemas cubren la mayor parte de la superficie terrestre, arropando hasta un tercio de ésta.
e. Praderas y Estepas
Argentina, Norteamérica, Australia y partes de Asia y el sur de África constituyen la mayor parte de estos ecosistemas, caracterizados por una vegetación dominante de césped, gramínea y pastos.
En este ecosistema proliferan especies de mamíferos como roedores, bisontes, pumas, antílopes y más. También habitan varias especies de aves, quienes suelen emigrar hacia lugares más templados en ciertas épocas del año.
f. Bosque templado
Es el tipo de ecosistema predominante en Europa y también hallado en Norteamérica, Chile, China y Oceanía.
Su flora debe resistir a cambios radicales de clima y temperaturas durante el año, por lo que son bastante adaptables, como: el abeto plateado, los arces, robles y más.
Asimismo, su fauna logró aprender diversos métodos para sobrevivir a todas las épocas anuales, en la que tanto la hibernación como la migración son las principales soluciones.
2. Ecosistemas Acuáticos
Estos ecosistemas tienen como bioma cualquier cuerpo de agua, desde un océano y mar hasta un humedal y pantano.
La fauna que abunda en estos biotopos son peces, reptiles y anfibios, aunque algunos mamíferos y algunas aves los usan como hábitats temporales, a excepción de las ballenas que permanecen la mayor parte de su tiempo bajo el agua.
Se dividen de la siguiente manera primaria: cuerpos marinos y de agua dulce.
a. Cuerpos marinos
Los ecosistemas marinos son los que gozan de mayor estabilidad en el planeta, variando poco sus temperaturas y salinidad. Se caracterizan por ser cuerpos de agua salada y masas colosales, como océanos y mares.
Fueron los primeros ecosistemas habitados, cuna de todas las especies actuales en el planeta. Cubre la mayor porción de la superficie y posee una amplia variedad de fauna.
En cuanto a su flora, son las algas sus principales protagonistas.
b. Cuerpos de agua dulce
Los ecosistemas de agua dulce están constituidos por pantanos, ríos, lagos y humedales.
Así como los cuerpos marinos fueron cuna de las especies sobre la Tierra, los cuerpos de agua dulce como ríos fueron cuna de las primeras sociedades de la humanidad, debido a su aportación en sales, minerales, flora y fauna adyacente.
Por lo menos hemos tenido un final “dulce” en este post. Esperamos haberte ayudado a clasificar breve y correctamente los ecosistemas que envuelven el planeta en que vivimos.