Los sustantivos forman parte de nuestro lenguaje cotidiano y sirven para nombrar a personas, cosas, animales y organizaciones.
Su utilidad es impresionante, de hecho, la oración no tendría sentido si no fuera por los sustantivos, muchas veces son usadas hasta inconscientemente.
¡Un detalle!
Los sustantivos son identificados por género y número. El primero se refiere a si es para referirnos a masculino o femenino, mientras que el segundo es para hablar en singular o plural.
Sabiendo este conjunto de detalles importantísimos, podemos abordar todos y cada uno de los tipos de sustantivos ¡ya verás cómo los relacionas con el día a día!
Tipos de Sustantivos, ¡Anótalos y no los olvides!
1. Sustantivos propios
También llamados “nombres propios”, se utilizan para diferenciar a un individuo o cosa de otra.
Se les dice propios porque se asignan, generalmente, a personas o lugares específicos, además que permiten distinguir a los mismos de lo común o genérico.
Para llevarlo a la práctica, el mejor ejemplo es tu nombre, la ciudad donde vives, el lugar al que quieres ir o el país que anhelas visitar.
En este caso el nombre empieza con la primera letra en mayúscula.
Ejemplos: Los resaltados en negrita son los sustantivos propios
- Alberto es una persona muy cariñosa.
- Mañana necesito ir a la ciudad de Caracas.
- Perú es un país maravilloso gracias a su gente y rica gastronomía.
- ¿Alguien en este lugar se apellida Rivero?
- ¡Hola! Ella es María.
2. Sustantivos comunes
Términos que se usan para mencionar cosas, animales, o lugares que se relacionan a una clase o especie en específica.
Por lo tanto, se acude a los sustantivos comunes para llamar o darle un nombre genérico a algo.
Son idóneos para hacer referencia a algo muy general, a diferencia de los propios, aquí no señalamos a alguien en específico, no es lo mismo decir: “Albertina sé cómo el helado” a decir “Los perros rompieron la camisa”.
Ejemplos (Los resaltados en negrita son los sustantivos propios)
- La gorra te queda espectacular.
- Los gatos son mascotas estupendas.
- Esa niña está llorando.
- La ciudad está llena de violencia.
- ¿Qué tal si vamos a la montaña?.
3. Sustantivos abstractos
Tal como su nombre lo indica, son un poco abstractos a la hora de explicarlos, un tanto confusos pues, sin embargo, son útiles para hacer referencia a pensamientos o sentimientos.
Permiten expresar lo que no puede ser percibido por nuestros cinco sentidos y por lo tanto no tienen una presencia física.
Son muy comunes en el día a día, de hecho en nuestras conversaciones seguramente siempre salen a relucir.
Ejemplos (Los resaltados en negrita son los sustantivos abstractos)
- El amor que siento por esa chica no lo puedo ocultar.
- Tengo una tristeza que me invade desde que te fuiste.
- Que rabia me da que traten mal a la gente.
- Luis tiene tanto sueño que se durmió en el autobús.
- Me hace falta más privacidad para estar tranquila.
4. Sustantivos individuales
Significan que una palabra hace referencia a algo en específico pero de modo personalizado, además en singular y que al mismo tiempo puede ser utilizada en plural.
De este modo, se verá incluida la persona, animal u objeto que esté relacionado con la acción del verbo.
Ejemplos (Los resaltados en negrita son los sustantivos individuales)
- Esas vacas se comieron todo el pasto.
- Se quebró la lámpara.
- Ese mueble de allá fue el que se ensució.
- Aquella persona se ha dedicado a criticar desde que llegó.
- A Daniela la picó una abeja.
5. Sustantivos colectivos
Este tipo de sustantivos son usados para hacer referencia a una serie de personas, animales u objetos que cuentan con características iguales.
Por ello, al hacer uso de los mismos veremos cómo de modo singular mencionamos a una agrupación entera, eso sí, siempre y cuando sean del mismo tipo.
¡Ojo! Se les llama colectivo si el equipo al que mencionamos se considera como tal.
Ejemplos(Los resaltados en negrita son los sustantivos colectivos)
- Una manada de perros venía hacia mí.
- La familia de los González fueron los primeros en llegar a la meta.
- Ese rebaño no fue arriado de la manera correcta.
- El equipo de gestión humana ha hecho un excelente trabajo.
- Gracias al comité de salud por su destacada labor.
6. Sustantivos concretos
Presentes en prácticamente todo lo que nuestros sentidos pueden detectar y por lo tanto nos ayudan a identificar qué es aquello que físicamente podemos apreciar por medio la vista, los oídos, el tacto, el olfato o el gusto.
Es gracias a los sustantivos concretos que le damos nombre a todo lo que vemos.
Ejemplos (Los resaltados en negrita son los sustantivos concretos)
- Me encanta mi cuaderno nuevo.
- El ruido de al lado me atormenta.
- El tronco del árbol está a punto de caerse.
- Ayer dejé mi lápiz en la casa de mi amigo.
- Necesito un trapo limpio para limpiar la mesa.
7. Sustantivos contables
Tal como su nombre lo indica, se usan para llevar un conteo o enumerar ciertas cosas a fin de tener un control sobre lo que se quiere.
Para ello los objetos deben ser identificados como unidades siempre y cuando formen parte de lo mismo a lo que se hace referencia.
Ejemplos (Los resaltados en negrita son los sustantivos contables)
- Ayer me comí cuatro cambures.
- Quedaron sabrosas las caraotas.
- Solo va a entrar al baño un solo niño.
- Tres sujetos asaltaron un banco.
- Tengo tanta hambre que me comería diez platos de sopa.
8. Sustantivos incontables
También conocidos como no contables, pues son aquellos aspectos que no pueden ser contados no mucho menos contabilizar de modo concreto.
Aunque no se pueden contar si pueden ser medidos por expertos a través de pautas específicas.
Ejemplos (Los resaltados en negrita son los sustantivos incontables)
- Llegó el agua.
- Estoy muy enfadado.
- Tengo muchas ganas de respirar aire fresco.
- Me encanta como huele la tierra mojada.
- El calor que está haciendo es sofocante.
Como podemos ver, todos los sustantivos están en nuestro vocabulario día a día, mucho más de lo que nos imaginamos, he ahí la importancia de ellos.