La actitud es el modo de comportarse de una persona ante determinadas situaciones, es el modo de ver la vida y encarar los momentos de alegría, tristeza, rabia, soledad, entre otros.
Este sentimiento depende de muchas cosas que ocurren a lo largo de nuestra estadía en este mundo, experiencias, todo lo que nos inculcan desde pequeños, valores y muchos aspectos más.
De ahí derivan las actitudes positivas y actitudes negativas, aquellas que están presentes en todo momento pero que no deben ser descuidadas ¿a qué nos referimos con esto? Es normal que como seres humanos tenemos aciertos y desaciertos, errores y virtudes, sin embargo, por eso es normal que aparezcan ambas formas de comportarse y actuar.
Lo que no es normal es que aparezcan en los momentos que no son idóneos, por ejemplo, una actitud positiva, risueña o de mucha alegría en un funeral, o por el contrario una actitud negativa que denota rabia o ira ante un logro de un familiar o compañero de trabajo.
¿Qué es Actitud Positiva?
Es la capacidad que tenemos para enfrentar con energía, tranquilidad, bajo los pensamientos motivadores y entusiastas los momentos engorrosos o que representen algún tipo de dificultad en nuestra vida.
Esta actitud aunque no debería faltar en ninguna persona para que logre una estabilidad emocional y le vea el lado positivo a cada uno de sus momentos, no puede alejarnos de la realidad.
¿Qué es una Actitud Negativa?
Todo lo contrario al punto anterior, en este caso las personas se comportan bajo una forma hostil que denota sentimientos de ira, tristeza y frustración.
Este comportamiento puede ser temporal o permanente y no solo afecta a la persona y a su estabilidad mental y emocional sino a todo el que lo rodea, especialmente a los que comparten con él/ella.
20 Ejemplos de actitudes positivas y negativas
A continuación, encontrarás 20 ejemplos que te harán reconocer fácilmente el tipo de actitud que tomas en determinadas ocasiones. ¡Acompáñanos y veras!
Así son las actitudes positivas
1 No compararse con los demás: Las comparaciones lo único que generan son sentimientos de frustración y envidia lo que afecta automáticamente la autoestima de una persona.
2 Agradecer por todo: Cuando la persona es agradecida con la vida se sentirá a gusto y con lo que le suceda, no tiene que dejar de ser realista ni ver las cosas como son pero si agradecer por tener una oportunidad para seguir viviendo y luchando por sus sueños.
3 Dedicar tiempo para uno mismo: No solo podemos ocuparnos de nuestros quehaceres diarios, cuando dedicamos tiempo a escucharnos y atendernos nuestra actitud mejora aún más.
4 No tratar de ser perfecto: Los seres humanos somos imperfectos por naturaleza y eso debemos entenderlo, nos equivocamos, tenemos aciertos y desaciertos y no podemos luchar contra eso. Al comprender este punto veremos la vida con una cara sonriente.
5 Dormir lo suficiente: Cuando dormimos lo que nuestro cuerpo nos exige nuestro estado de ánimo estará sumamente óptimo y hay probabilidades que al comenzar el día nuestra actitud sea positiva a pesar de las adversidades.
6 Escucharse uno mismo: Todos debemos dedicar tiempo a escucharnos y no perder nuestro norte, valorar lo que hasta el momento hemos hecho dejando a un lado las críticas hacia nosotros mismos, eso es tener actitud positiva.
7 Compromiso con lo que queremos: Cuando mostramos compromiso en cada uno de nuestros objetivo de principio a fin nos sentiremos bien internamente, pero, si nos trazamos una meta y nos desviamos a otra ahí es cuando aparecen los signos de inconformidad.
8 ¡Cuerpo y mente sana!: Mantener nuestro cuerpo sano, con buena alimentación y una corta rutina de ejercicios, acompañados de pensamientos amistosos elevará los niveles de serotonina, garantizando un estado mental optimista y alegre.
9 Darle valor a lo que nos sucede o rodea: Cuando entendemos que valorar todo lo que está a nuestro alrededor y el esfuerzo que nos ha costado conseguirlos nuestro modo de ver la vida siempre será optimista, esto abrirá nuestra mente a pensamientos positivos y alegres.
10 Verle la cara positiva a la vida: La vida está llena de altos y bajos lo importante es verle siempre algo positivo a lo que sea que nos suceda, de lo contrario, estaríamos sumergidos en una tristeza o rabia profunda.
Así son las actitudes negativas
1 Verle lo negativo a todo: Más importancia tiene lo que interpretamos que la misma situación, este es un ejemplo claro de la gente que se queja y ve el lado negativo a todo. Si lo saludan dice que es para criticarlo y si no, asegura que no es bien recibido.
2 Compararse con otro: La comparación hace un daño impresionante a nuestra autoestima, además es causante de estrés y depresión. Lo recomendable es mejorar nuestra actitud, reforzar nuestras habilidades pero jamás compararnos con el trabajo o la potencialidad de otra persona, si es así nunca saldremos de una mala actitud.
3 Ser insolente: Cuando pasamos por encima de la persona con quien estamos hablando sin respetar su autoridad estamos siendo insolentes, esta actitud evidentemente es negativa y causa molestia en los demás, al punto que lleguemos a ser rechazados y que nadie se tome la molestia al menos de intercambiar palabras.
4 Ser pesimista: Esta mala actitud es sinónimo de derrota, en este caso la persona se siente incapaz de lograr un objetivo y esto le impide realizar o cumplir con cualquier tarea que le sea asignada. Ese tipo de gente que va a hacer algo y afirma “no creo que pueda”.
5 Actuar con soberbia: Esas personas que se sienten superiores a los demás, no siguen consejos y mucho menos escuchan otras experiencias generalmente tienen muchos encontronazos en la vida, este tipo de gente se hace mucho daño y también aleja a cualquier otro.
6 Discriminar: Las personas que optan por discriminar a otro sienten rabia hacia alguien con tipologías particulares ¿la razón? Pueden ser miles, el hecho es que pretenden abusar del respeto de los demás, además de señalar y juzgar. Sucede mucho con las personas que rechazan a alguien por su preferencia sexual, pertenecer a una religión específica, tener un color de piel oscuro, entre otros casos.
7 Echarle la culpa a los demás: Echarle la culpa a otros de lo que nos sucede no aliviará más las cosas, al contrario, nos alejará de los pensamientos positivos y la manera de enfrentar los problemas. Esta forma de comportarse traerá como consecuencia pesimismo, enojo permanente y mucha melancolía.
8 Criticar: Cuando alguien se dedica a criticar y no reconocer las aptitudes de otros no solo molestara a cualquier persona sino que también se hará un daño interno y exterioriza frustración.
9 Ser burlista: La gente burlista aleja los deseos de cualquier persona al querer acompañarnos o estar con nosotros. Quien es burlista no solo demuestra una actitud negativa sino que termina quedándose solo o perdiendo las pocas amistades que tiene.
10 Ser apático: Las personas que evitan estar presentes en eventos de compartir o convivir con alguien sin víctimas de la falta de ganas de hablar, enfrentarse a la vida, retos, compartir, dialogar, en fin de vivir.
Como te podrás haber dado cuenta, ambas actitudes están presentes en la vida cotidiana pero ¿tú cual eliges?