Seguridad nos habla de confianza, en este caso tener seguridad en uno mismo es la visión y/o definición positiva que tenemos acerca de nosotros, nuestras potencialidades, aptitudes y destreza, por ende tiene que ver con la alta autoestima.
Quienes tienen seguridad en sí mismos saben que tienen control sobre cada cosa que hacen y cada proyecto que emprenden, por lo tanto se sienten más tranquilos, seguros y esperanzados en cada decisión que toman o en cada acción que hacen.
Es sumamente importante manejar esta actitud en la vida cotidiana pues nos permitirá defendernos en todo momento y encarar el día a día como más ánimo, fortaleza y actitud positiva.
Pero, si nos podemos a hablar de las ventajas podemos pasar páginas y páginas escribiendo, veamos una a una cuales son.
Ventajas de tener Seguridad en uno mismo
- Hace de las personas más perseverantes en su acciona, pues aunque no obtengan los resultados esperados son insistentes y luchan por lo que quieren.
- No dependen de las opiniones de los demás para sentirse a gusto y por lo tanto no les llama la atención complacer las opiniones adversas, esto les genera paz mental y estabilidad emocional.
- Cuando crees en ti mismo los demás también tienen a hacerlo, este tipo de sentimientos se transmiten y por lo tanto se hace recíproco.
- Permite que las personas asuman riesgos, sean capaces de tomar sus decisiones, por lo tanto no tienen miedo a fracasar y al enfrentarse a cualquier tipo de riesgos tienen más posibilidades de obtener buenos resultados.
- Las personas con confianza en sí mismos son un ejemplo a seguir para cualquier generación desde los más pequeños hasta los más adultos, esto fortalece tu autoestima y al mismo tiempo te hace sentir útil a la sociedad.
¿Cómo Confiar en ti mismo?
Viendo lo ventajoso y beneficioso para la salud mental lo que significa confiar en uno mismo, a continuación te orientamos para que puedas mejorar tu seguridad y autoconfianza.
1. Enfrenta los retos
Aprende a ver los desafíos como oportunidades para crecer, así sea que ganes o pierdas, date la oportunidad de participar en los retos y desafíos que la vida tiene para ti.
De este modo, también aprenderás a conocerte, crecerá tu autoestima y mejorarás tu capacidad para confiar en tus habilidades, nunca dudes, siempre ten un concepto positivo de ti, lo importante no es llegar a la meta sino sentirte bien contigo mismo de haberlo intentado.
2. ¡Siempre alegre!
Mantén un sentido del humor agradable, la vida trae aciertos y desaciertos, así que trata siempre de verle el lado positivo a las cosas, saca una buena sonrisa, ríete, se feliz y disfruta de cada momento.
La confianza en ti mismo también depende de tu estado de ánimo, así que nunca pierdas ese buen sentido del humor.
3. Escúchate, habla con tu yo interno
Psicólogos recomiendan que lo mejor para mejorar la seguridad en ti mismo es hablar con tu yo interno.
Por lo tanto, identifica cuales son los aspectos o deseos negativos que rondan por tu mente, luego dales un alto y comienza a buscar motivos que sustenten el hecho de que eres capaz de lo que te propongas.
Mientras te aceptes tal y como eres veras como mejorará tu autoestima y nivel de seguridad en ti mismo.
4. Evalúate
Que la tarea de evaluar tus alcances sea solo tuya, no delegues esta función en los demás.
Evalúa cómo te sientes por tus actitudes, aptitudes, comportamientos y por cada paso que das en este mundo, de este modo, solo tú tendrás el control de ti mismo sin tener que depender de lo que piensen otras personas, tú mismo tienes el control de todo.
5. Cambia tu modo de pensar
No basta con las frases positivas, por supuesto, estas ayudan a elevar tu autoestima y motivación, pero falta algo.
Ese algo tiene que ver con la manera de pensar, es como una revisión exhaustiva y profunda de cómo nos vemos internamente.
Somos lo que pensamos y por lo tanto si estamos siempre pensando en nuestros defectos o errores nunca aprenderemos a tener seguridad, así que no esperes más y aprende a mirarte desde otra perspectiva que te aporten armonía, tranquilidad y positivismo.
¿Por qué a veces no logro conseguirla?
- Pensamientos extremistas: Al no llegar a la meta, comienzas con pensamientos totalmente negativos y lúgubres.
- Todo lo ves mal: Siempre tienes una crítica de algo, nada te parece y nada te gusta.
- Etiquetas: Siempre te pones etiquetas en cualquier proceso. “Soy malo para esto o aquello, soy un estúpido, no soy capaz”.
- No te interesan los cumplidos: Al escuchar que alguien te dice un piropo no lo aceptas y lo que haces es recordar cuantos defectos tienes.