¿Para Qué Sirve la Aspirina?

La aspirina es el nombre comercial de un medicamento conocido como Ácido Acetilsalicílico (ASA) que sirve para reducir la inflamación, eliminar el dolor y la fiebre.

Este medicamento ejerce su efecto sobre una enzima llamada Ciclooxigenasa cuya función consiste en favorecer la cascada de inflamación causando dolor y fiebre principalmente.

Por otra parte, puede ser administrada con seguridad en aquellos casos de dolor intenso y fiebre, y con el paso del tiempo se determinó un efecto fundamental sobre la coagulación sanguínea.

Al actuar sobre la cascada inflamatoria, la aspirina reduce la unión de las plaquetas entre sí, proceso que se denomina anti-agregación plaquetaria y que es fundamental en enfermedades cardiovasculares.

¿Para Qué Sirve la Aspirina?

La aspirina debe ser administrada bajo prescripción médica debido a los efectos secundarios severos en algunas personas. A continuación explicaremos lo que debes saber sobre la aspirina:

1. La Aspirina Como Antipirético

Este medicamento ejerce su efecto sobre la cascada inflamatoria al bloquear a la Ciclooxigenasa, de esta manera se bloquean todos los mediadores encargados de producir fiebre.

En procesos infecciosos, el organismo aumenta su temperatura por encima de 37,5 °C como mecanismo de defensa ante una bacteria o virus principalmente.

Esos fenómenos están comandados por unas células del sistema inmunológico llamadas glóbulos blancos y aunque es de esperarse en una infección, la fiebre provoca deterioro del estado general.

Ahora bien, también sirve para bloquear la cascada inflamatoria responsable de producir la fiebre, ejerciendo un efecto antipirético importante.

Además de indicarse tratamiento para reducir la fiebre como la aspirina, es fundamental atacar el proceso infeccioso responsable o determinar la causa cuando no se debe a una infección.

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La aspirina es una píldora muy eficaz para los pacientes con enfermedades cardiovasculares

2. La Aspirina Como Antiinflamatorio

El mecanismo de acción de la aspirina sobre la cascada inflamatoria, permite reducir los mediadores inflamatorios y de esta manera los tejidos afectados retornan a la normalidad.

Los procesos inflamatorios articulares son lo que anteriormente eran tratados con aspirina sin embargo con el descubrimiento de otros medicamentos antiinflamatorios, se ha dejado de lado este medicamento.

La aspirina sirve para el tratamiento de cuadros inflamatorios crónicos especialmente cuando no responden a otra clase de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINES).

3. La Aspirina Como Anti-Agregante Plaquetario

El efecto de anti-agregación plaquetaria es uno de los más importantes que recientemente se determinó de la aspirina, por lo que forma parte del tratamiento en personas con cardiopatía.

La antiagregación consiste en prolongar discretamente el tiempo que demora la sangre para coagularse, lo cual muestra beneficio especial en personas con enfermedades cardiovasculares.

Cuando el corazón o los vasos sanguíneos no tienen un funcionamiento óptimo, puede obedecer a la presencia de placas de ateroma que son consecuencia del consumo excesivo de grasa.

Además de eso, podría suceder que existan trastornos en la función cardiaca; en consecuencia el bombeo de sangre no es adecuado y tiene mayor riesgo de producir coágulos sanguíneos.

La aspirina sirve para reducir el riesgo de formación de coágulos sanguíneos que pudieran provocar enfermedad cerebrovascular, infartos cardiacos, renales e intestinales, asociados a altos índices de mortalidad.

Precaución

  • La aspirina no se debe administrar en personas que refieran alergia a este medicamento.
  • Debe ser indicada con gran precaución en aquellas personas que padecen úlceras gástricas y duodenales por el alto riesgo de sangrado que puede provocar.
  • Es importante indagar en las personas que rutinariamente consumen aspirina, si han tenido síntomas como acidez y reflujo, pues su consumo prolongado causa gastritis y úlceras.
  • En vista de que producen disminución en la coagulación de la sangre, pueden provocar sangrado con facilidad por eso debería suspenderse cuando se va a realizar algún procedimiento médico.
  • Si una persona que recibe aspirina padece de sangrado nasal, gingival, menstrual o intestinal, debería suspenderla y recibir atención médica de inmediato.
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