El té verde es una bebida a base de hojas del arbusto Cammelia sinensis y Cammelia assamica originario de China, India, Japón y Vietnam que durante siglos se ha consumido y ha demostrado aportar extraordinarios beneficios para nuestra salud.
Existen 3 modalidades de este tipo de té que son el té verde cuyas hojas no sufren ningún tipo de oxidación salvo someterse a procesos de secado y envolverse para el consumo, el té negro y el semifermentado.
Suele prepararse fría o caliente para ingerirla como detoxificante o sencillamente como acompañante de nuestras comidas en la rutina diaria.
Se compone de vitaminas como la vitamina A,B y C así como también aquellas vitaminas B12 y oligoelementos como el zinc, magnesio, manganeso, cobre y calcio esenciales en el cumplimiento de funciones celulares vitales.
Sin embargo son tantos sus beneficios que a continuación haremos un breve resumen de cada uno de ellos:
1. Optimiza el rendimiento físico al favorecer el aporte de energía
Es un estimulador del metabolismo, ya que contribuye a que las funciones metabólicas se efectúen de forma acelerada y en consecuencia se consumen más calorías al día.
Por otra parte favorece la lipolisis, procesos que consiste en reducir el tejido graso para convertirlo en energía y de esta forma se pierde peso asociado con un régimen dietético adecuado.
Por lo tanto permite que las actividades físicas que implican mayor esfuerzo y las actividades rutinarias, sean realizadas sin tanto esfuerzo y sin implicar ningún tipo de agotamiento físico.
Cuando las personas consumen té verde se sienten más enérgicas y capaces de enfrentar cualquier reto que se les presente a lo largo del día.
Es por eso que se recomienda consumirlo durante la mañana para que nos mantenga despiertos y activos y podamos mantener suficiente energía a lo largo del día.
2. Potente antioxidante
Una vez que se distribuye a lo largo de todo el organismo, los componentes del té verde son capaces de tomar los radicales libre y eliminarlos a través de muchas vías.
Los radicales libre son los productos finales de compuestos químicos que generalmente adquirimos a través de los alimentos y bebidas muy procesadas asa como el consumo de sustancias como el cigarrillo, licor y drogas de consumo ilícito.
Al eliminar los radicales libres estamos favoreciendo que tengamos una sangre más pura y limpia y que además evite que se altere la función celular y de ésta forma se previene la aparición del cáncer.
Ciertas enfermedades como diabetes mellitus, artritis, VIH y cáncer sumado a la cantidad de medicamentos que se deben consumir, son altos productores de radicales libres por lo que es recomendable consumir té verde para permitir la detoxificación.
3. Contribuye con una mejor salud del hígado
El té verde por sus propiedades detoxificantes ejerce un efecto depurador sobre el hígado lo que significa que lo limpia de todas las toxinas que pasan por ese órgano una vez que se cumple la digestión.
En casos en los que existe algún tipo de inflamación como el hígado graso o por el consumo prolongado de licor, el té verde produce potentes efectos antiinflamatorios que evita otras complicaciones a largo plazo como la cirrosis hepática.
Por lo tanto éste tejido puede funcionar más adecuadamente y se filtran todas esas sustancias toxicas para posteriormente ser eliminadas a través de las bilis hacia el colon y luego con las heces al exterior del cuerpo.
4. Mejora las funciones cerebrales
Las conexiones entre las células del cerebro requieren de vitaminas y oligoelementos como los aportados por el té verde, por lo tanto cuando es consumido permite que las funciones cerebrales mejoren considerablemente.
Esa es la razón por la que la memoria, el habla, los movimientos finos y el pensamiento lógico se ven beneficiados con el consumo de té verde y las personas refieren sentirse mentalmente frescas capaces de cumplir con su rutina.
Se ha demostrado también que consumir el té verde desde etapas tempranas de la adultez evita que aparezcan enfermedades como el Parkinson y el Alzheimer.
5. Efecto protector sobre el sistema cardiovascular
Ante sus propiedades de aportar oligoelementos, vitaminas, tomar radicales libre y favorecer la lipólisis, se evita que se depositen las placas de ateroma en las paredes de los vasos sanguíneos.
Una placa de ateroma es una molécula compuesta por tejido graso que puede variar de tamaño y obstruir el flujo de sangre lo que compromete la oxigenación en general y según sea el órgano afectado serán las consecuencias.
Los casos más severos ocurren en el cerebro, corazón, riñón e intestino provocando enfermedad cerebro vascular, infarto al miocardio, infarto renal e isquemia intestinal respectivamente por lo que al consumir periódicamente té verde disminuye el riesgo de padecer estos trastornos.
Las placas de ateroma aparecen con más frecuencia en aquellas personas que consumen grandes cantidades de grasa y cursan con altos niveles de triglicéridos y colesterol.
6. Contribuye con una adecuada salud gastrointestinal
El té verde no ha demostrado ser un atacante del estreñimiento sin embargo mejora considerablemente el transito gastrointestinal al aportar antioxidantes a sus células permitiendo que éstas funcionen adecuadamente.
Por lo tanto las personas que lo consumen suelen quejarse con menos frecuencia de síntomas como acidez, gases y diarrea comparados con aquellas personas que no lo consumen rutinariamente.
7. Disminuye el riesgo de padecer de cáncer
Como ya hemos mencionado, el riesgo de adquirir cáncer se ve bastante reducido dadas sus propiedades antioxidantes, sin embargo las personas que consumen té verde diariamente llevan además regímenes dietéticos muy saludables y practican actividad física de forma rutinaria.
Esa quizá es la razón por la que personas que consumen con frecuencia este tipo de bebida suelen tener mejor calidad de vida y no suelen padecer enfermedades cancerígenas.
Se ha concluido que el té verde evita la aparición del cáncer al favorecer la liberación de radicales libres lo que evita las alteraciones en la multiplicación de células defectuosas responsables de la aparición de cáncer.
8. Estimulador del sistema inmunológico y potente antiinflamatorio.
El té verde tiene un efecto regulador sobre las células del sistema inmunológico permitiendo que nuestras defensas ante procesos infecciosos bacterianos, virales y parasitarios se mantengan elevadas y podamos defendernos para evitar contagiarnos.
Por otro lado en procesos inflamatorios como la artritis reumatoide y la artrosis, el té verde ha demostrado reducir la inflamación por lo que las personas que padecen estos trastornos se ven altamente beneficiadas de consumirlo.
9. Fortalece el tejido óseo
Dado su alto contenido en calcio, magnesio y fósforo, el té verde contribuye con el metabolismo de dichos minerales en el organismo, los cuales ejercen su principal efecto sobre la composición y estabilidad de los huesos.
Por lo tanto cuadros de dolor óseo crónicos e incluso casos de fracturas y fisuras se ven considerablemente beneficiados al consumir té verde.
10. Mejora la salud bucal
Durante años se ha utilizado para reducir los procesos inflamatorios bucales que abarcan encías, lengua y mucosa bucal así como el alto efecto antiséptico que ha demostrado tener esta bebida, por lo tanto aporta sonrisas sanas y estéticamente llamativas.
Previene la aparición de procesos infecciosos y además permite mejorar el mal aliento en aquellas personas que no tienen ninguna causa justificada de halitosis.
Como podemos ver son múltiples los beneficios que ofrece esta bebida natural y de relativa fácil adquisición por lo que vale la pena considerar su inclusión en nuestra rutina dietética diaria bien sea como bebidas frías o caliente.
Hay personas que incluso sustituyen el consumo de café por el té verde obteniendo resultados más favorables en su actividad diaria.
Recordemos que un estilo de vida saludable, una mente sana y cuerpo sano son la clave para tener una vida feliz.